El 2021 comienza con los mercados financieros movidos y sin dar señales de que volvamos a la antigua normalidad en ningún aspecto.
Debido a la pandemia, una gran masa de personas se está viendo afectada en sus negocios y actividades, sin poder levantar cabeza. Los millennials también han visto durante años su futuro tornarse sombrío. Ya no hay un camino claro para poder sostenerse económicamente a sí mismos, y mucho menos a una familia. Los paradigmas han cambiado, y la educación ya no ofrece una salida laboral segura como en anteriores generaciones.
Mientras tanto, los grandes fondos se defienden incluso sacando partido a las desgracias mundiales, con un gran poder de capital para invertir en largo y también invertir en corto. Tienen la capacidad – y la ejercen – de ganar dinero cuando determinada empresa o sector sufre las consecuencias de una demanda muy debilitada por la pandemia, por ejemplo las aerolíneas, retail, turismo, petróleo.
Los traders también han invertido mucho en el comercio automático con robots bitcoin como el Bitcoin Revolution.
Pero de repente, las tecnologías – como redes sociales y blockchain – amenazan con cambiarlo todo y darle una vuelta de tuerca a la balanza de poderes. Si una gran cantidad de actores pequeños son capaces de ponerse de acuerdo y coordinarse en una dirección (operando acciones o CFDs), pueden alcanzar el mismo – o más – efecto en los mercados que los grandes fondos, hasta ahora acostumbrados a reinar y manipular a su antojo.
Las redes sociales y el caso GameStop
Un ejemplo es la red social Reddit, una web de marcadores sociales y agregador de noticias donde los usuarios pueden añadir texto, imágenes y donde más de dos millones de usuarios se pusieron de acuerdo para comprar acciones de la compañía GameStop haciéndola subir la cotización hasta 347 USD , precio al que cerró el 27 de enero con una revalorización de +1,744% en el año, es decir, alguien que fuera accionista a finales de 2020 habría multiplicado su precio por 17 veces.
La compañía GameStop es una cadena de tiendas de videojuegos, electrónica de juegos estadounidense. Debido a los nuevos hábitos de consumo online y potenciado por la pandemia, llegó a cotizar en mínimos históricos. Y allí los grandes fondos se han lanzado a operar en corto para beneficiarse de esto.
La horda repentina y coordinada de los traders retail que invirtieron al alza, han producido así el denominado “short squeeze”, que se da cuando los precios del mercado suben más rápido de lo esperado y se producen “estrangulamientos de posiciones cortas”. Aquellos inversores que estaban bajistas en GameStop con acciones prestadas, se ven obligados a recomprar las acciones para su posterior devolución de las acciones prestadas.
Un hedge fund afectado ha sido Melvin Capital, que estaba posicionado bajista y tuvo que cerrar posiciones con fuerte pérdidas y podría llegar incluso a tener que cerrar su fondo por falta de liquidez.
En la red social antes mencionada, también se están hablando sobre otras compañías cotizadas denostadas u olvidadas por el mercado como son Nokia, BlackBerry y AMC (cadena de cines), en las cuales se han producido también fuertes subidas estos días.
La Revolución también en el Blockchain
También se han desatado fenómenos similares coordinados en el mundo de las criptodivisas (Doge coin, XRP), donde ya de por sí hay comunidades organizadas de traders que apoyan a una determinada moneda o tecnología.
Y se perfila que pueda seguir habiendo movimientos que cambien las reglas del juego. El blockchain es otro área donde la descentralización de la tecnología nos puede llevar a un mundo nuevo donde el pequeño actor cobre más poder en comunidad, y los grandes poderes lo pierdan.
Un ejemplo de ello es la criptomoneda BAT, que con un navegador de Internet llamado Brave Browser, crea un sistema donde los usuarios son recompensados económicamente por su atención a los anuncios (Basic Attention Token), dándoles también la posibilidad de eliminarlos. Así podría poner en jaque el modelo de gigantes como Google que intermedia en la publicidad, lucrándose de los usuarios que deben tragarse todos los anuncios sin recibir nada a cambio.
Otro ejemplo sería la creación de redes sociales y mercados financieros descentralizados que nadie pueda regular ni “moderar”, con todo lo bueno y lo malo que eso podría desencadenar.
Los próximos meses y años pueden ser muy interesantes, las revoluciones comienzan despacio pero una vez iniciadas los cambios pueden ser grandes y rápidos, tenemos que estar preparados.
Artículo firmado por Rosario de la Fuente